La  mala teología y la mala práctica de la teología nos ha llevado a minimizar la necesidad de orar por nuestros pastores. La mala teología ha puesto a los pastores en una posición inalcanzable dando la imagen de que son ser seres superiores espirituales, que no fallan y que no tienen problemas. Se les ha ubicado en una posición en la que ellos no necesitan de la oración de sus hermanos. Quizás has escuchado el dicho “los ungidos del Señor”, frase que Satanás ha aprovechado para corromper a los pastores y ponerlos como ídolos para los creyentes. Por supuesto, ambas cosas no son lo que Dios quiere.

Tampoco ha ayudado mucho la fama de los pastores de mega iglesias, siempre empujando la imagen de bendecido en los medios, incluyendo a pastores de sana teología y sus publicaciones constantes en las que nunca mencionan arrepentimiento o necesidad de oración. En muchos casos ha causado un efecto negativo en las personas haciéndolas creer que todo está bien con ellos y sus ministerios y que no necesitan de la oración del creyente promedio.

Otros no orarán por sus pastores porque quizás en el pasado algún pastor les lastimó, les desilusionó o les causo heridas. Este mal ejemplo tristemente ha hecho que estos miembros desilusionados descarguen todo esto sobre el pastor actual.

Quizás has escuchado muchas críticas hacia aquellos hombres que desempeñan la noble labor de pastor, de hecho muchos han catalogado esta profesión como una pérdida de tiempo, llena de corrupción y avaricia; muchos llegan a pensar que la profesión de pastor es para vagos, mantenidos, estafadores o personas no preparadas. Esto no es completamente la realidad de este noble llamado.

En este escrito no voy a defender a los pastores. Por convicción pienso que los pastores reales no necesitan ser defendidos ya que su defensor es el Señor mismo, pero si escribiré de ¿Por qué tu pastor necesita de tus oraciones?

Es importante aclarar que cuando me refiero al término pastor estoy incluyendo a los ancianos de la congregación.

En una ocasión le preguntaron a un predicador ¿Cuál era el secreto del éxito de su ministerio? Él respondió “Mi iglesia ora por mi”. Efectivamente, su iglesia estaba comprometida a orar fielmente por él como su pastor.

¿Por qué deberíamos orar por nuestro pastor?

Los pastores somos seres humanos al igual que tú, enfrentamos los mismos desafíos que enfrentas tú, nos agotamos, nos frustramos, nos enfermamos, lloramos, nos deprimimos y tristemente muchos podemos caer en depresiones profundas. Somos tentados, tenemos días difíciles como tú, nos enfrentamos al mismo mundo al que te enfrentas. Muchas veces se vuelve un rol agotador y doloroso, pero sabemos que no trabajamos en vano.

Los pastores buscamos ayudar a la grey a caminar por fe y vivir para la gloria de Dios, por lo que deberías orar para fortalecernos y que nosotros mismos experimentemos el glorioso amor de Cristo.

Generalmente los pastores recibimos las críticas, las quejas y los comentarios negativos de miembros inconformes, molestos. La mayoría de las veces sucede un sábado (antes de la prédica del domingo), después de un servicio o el lunes cuando quizás somos más vulnerables a los ataques de satanás.

Los pastores somos hermanos en la fe que necesitamos de las oraciones de la iglesia, no somos una raza superior de creyentes, necesitamos del ánimo de unos a otros. 
Orar por los pastores es crucial para la salud de una iglesia y necesario para la salud espiritual de él mismo y su familia. Sabes, Dios pedirá cuentas a tu pastor por la iglesia que Él ha puesto en sus manos. Aunque todo creyente estará ante Dios Santo rindiendo cuentas, los pastores rendiremos cuentas de nuestra vida y de nuestra labor pastoral, y solo de pensarlo da temor. Hebreos 13:17; Santiago 3:1. 

Los pastores necesitamos específicamente de la oración. Satanás nos tiene en la mira y si el pastor es fiel a la proclamación del evangelio, sátanas intentará con todas sus fuerzas eliminar a este pastor destruyéndole a él, a su ministerio, destruyendo a sus hijos y familia. No creo que los demonios y las huestes del mal estén preocupados por pastores como Dante Gebel, Guillermo Maldonado, Cash Luna, entre otros, de hecho satanás ayuda a estos pastores y sus ministerios para que sean instrumento de tropiezo al hombre. Por otro lado, satanás sí ataca a pastores fieles al evangelio y hace todo lo que pueda para destruirles

¿Cómo orar por nuestros Pastores? Lo mejor manera y más simple es preguntarle directamente a tu pastor cómo puedes estar orando por él y su familia. Te aconsejo hacer un plan para orar por tus pastores y ser fiel en orar por ellos por amor a Cristo y a su Iglesia.

Pero, mientras estés en el proceso de preguntarles y hacer un plan de oración, puedo ayudarte a orar en base a estas cinco cosas que he extraído de los valores que tenemos como iglesia, para hacerlo práctico y fácil de recordar.

1. Ora para que tu pastor le dé solo y toda la Gloria a Dios por medio de su vida.

Orar de esta manera es en cierta medida pedir por sabiduría, inteligencia espiritual y discernimiento para tu pastor y que él pueda tomar decisiones que le den toda la gloria a Dios. 
Orar para que tu pastor de la gloria a Dios es orar para que crezca en el conocimiento de Cristo y mientras más crece, más desarrolla un amor profundo por el Señor dándole toda la gloria a Él. Si oras para que tu pastor le dé la Gloria a Dios entonces estas orando para que tu pastor permanezca fiel a su llamado y huya de la tentación. 
Orar de esta forma es orar para que tu pastor sea un hombre humilde, quebrantado y sea por sobre todas las cosas un hombre de oración. Efesios 6:18

2.  Ora para que tu pastor Sirva a Dios con todo su corazón.

Orar de esta manera es pedirle a Dios que tu Pastor sea un ejemplo de servicio para ti, no solo en la labor ministerial sino también para que él sea fiel en servir a su familia amándoles y guiándoles primeramente al Señor. Si tu pastor no ama, no sirve y no protege a su familia principalmente, tampoco no lo hará por ti como congregación. Así que ora a Dios para que tu pastor sirva a Dios de todo corazón en todas las áreas de su vida. 

3. Ora para que tu pastor Obedezca a Dios en todo.

Orar esto por tu pastor es orar para que permanezca fiel a las escrituras, es orar para que obedezca a todos los preceptos del Señor aplicando la verdad de Dios a su propia vida. Debes orar para que tu pastor obedezca a Dios en todo siendo un fiel predicador del evangelio y que lo haga con seguridad y en el poder del Espíritu Santo. (Efesios 6:19) 
Orar para que tu pastor sea obediente a Dios es orar para que el sea fuerte, valiente y se esfuerza en trabajar duro para el Señor alimentando la iglesia. (2 Timoteo 4:2) 

4. Ora para que tu Pastor tenga gozo en Cristo. 

Cuando oras para que tu pastor tenga gozo en Cristo, estas orando para que pueda experimentar gozo real en medio de las pruebas, estas orando por contentamiento sin importar las circunstancias. Orar así le protege de manera divina para que encuentre ánimo y fuerza en el Señor y no se desanime cuando reciba críticas, insultos o quejas de su labor.
Orar para que tu pastor tenga gozo en Cristo es orar para que él pueda poner la mirada en las verdades eternas y no en el fracaso, caída y pecado de los miembros de su iglesia. 

5. Ora para que tu pastor este sometido a la Supremacia de Cristo. 

Orar así es orar para que tu pastor sea un hombre cuya identidad se encuentre solamente en Cristo, confiando en el poder de Dios y no en sus propias habilidades, contactos, recursos; incluso no valiéndose de su inteligencia sino de Cristo únicamente.

Para terminar, déjame hacerte algunas preguntas. ¿Amas a Cristo? ¿Realmente amas a Cristo?  Si le amas entonces amas su Iglesia y también a tu iglesia local, y si amas a tu iglesia local amas a tus hermanos y si amas a tus hermanos amas a tu pastor. ¿Realmente quieres que tu iglesia sea saludable? Entonces ora por tu pastor. El mejor regalo que le puedes dar a tu pastor y la mayor contribución que puedes dar a tu iglesia es orar por tu pastor. 

Mi anhelo es que puedas amar a tu pastor por lo que es, “Un hijo de Dios” no por su talento, habilidades, o incluso su personalidad. En lo personal me siento agradecido con Dios por Petra Managua, mi iglesia, que ora por mí, espero que puedas apreciar a tu pastor como tu hermano en Cristo.

Eres Amado.